La familia se refugió en otra casa y les entraron a robar. Fue en Mendiolaza Centro.
En la noche del jueves, cuando Adriana Almada y su marido ya se habían acostado, escucharon una explosión y comenzó el fuego en la casa que habitan desde hace diez años sobre la Av. San José de Calazans en Mendiolaza Centro.
«Estábamos viendo la novela y sentimos como un zumbido y una explosión muy fuerte. Pensé que un auto había chocado la puerta. Nos levantamos rápido, veíamos las luces y todo era llama. Le digo: es un auto no te acerques porque puede explotar. No hay auto – me decía él – no hay auto. De dónde salió este fuego si no dejamos prendido?«, relata Adriana
«No podíamos salir porque no tenemos otra salida. La puerta del fondo está trabada para que no se entre gente extraña. Empezamos a los gritos, desesperados. Daniel se quemó las manos arrancando las cortinas y tratando de abrir la puerta. Mi hermano y los chicos de al lado lograron abrir la puerta y abrir me sacaron a mí primero, pero a él no lo encontraban por el humo negro», continúa Adriana.
Bomberos y policías se hicieron presentes y lograron apagar el fuego. Fueron ellos quienes le dijeron a Adriana que entendían que el incendio se habría iniciado por una bomba molotov ya que en la escena encontraron un bidón.
Pero allí no acaba la tragedia de la familia Almada. Esa noche, por las condiciones en las que había quedado su casa, se retiraron a dormir en otro domicilio. A la mañana siguiente, tras realizar la denuncia por el incendio, volvieron a su hogar y descubrieron que habían sido víctimas de un nuevo delito. Durante la noche, ladrones entraron por los techos y les robaron, además de garrafas y enseres domésticos, todas las herramientas de Daniel
Daniel sufrió un ACV a fines del año pasado, con lo que su capacidad de trabajo disminuyó. Durante la cuarentena hizo un curso de cerrajería para ampliar sus posibilidades laborales, pero todas las herramientas que había ido comprando, fueron robadas la misma noche en que le incendiaron la casa.
«Ahora pedimos piedad, nosotros no hacemos mal a nadie», concluye Adriana.
Quienes puedan colaborar con ellos, comunicarse al 03543-15617093.