Buscan recuperar su canchita en Mendiolaza

La emblemática Canchita de Güemes convoca otra vez a los vecinos

Buscan recuperar su canchita en Mendiolaza

La Canchita de Güemes, en B° Los Cigarrales ha convocado a niños y adolescentes desde la década del 70. Primero potrero, después cancha, más tarde aislada e invadida por El Terrón, y arrasada por un sinnúmero de crecientes, es un ícono de la comunidad. Fue motivo del primer intento de una Iniciativa Popular y hoy moviliza a los vecinos que buscan recuperar su canchita en Mendiolaza

Del potrero a la cancha

En la década del ’70, Tomás Roque Güemes, conocido por todos los vecinos de Mendiolaza como “Don Güemes», inició a una serie de encuentros para niños y adolescentes de la zona, estableciendo como lugar de reunión un potrero ubicado entre las calles 6 y 16 de B° Los Cigarrales. Allí transmitió a éstos su pasión y amor por el fútbol, educando a los jóvenes, inculcando valores e incluso organizando grupos para competir en diferentes campeonatos, bajo el nombre de “Club Unión”.

Al cabo de unos años Güemes y sus chicos sufrieron la pérdida de este espacio, ya que los dueños del terreno vendieron la propiedad y fue ocupada por sus compradores.

Con motivo de ello, Güemes le comentó la situación a su amigo Oscar Cruzado, quien era intendente de Mendiolaza en ese momento. Cruzado le ofreció un terreno de Aguas Cordobesas que se encontraba inutilizado, ubicado cerca del antiguo potrero -pero del otro lado del Arroyo Saldan- para que allí instalaran una nueva cancha. Al predio se podía ingresar de dos formas, en vehículo por un badén sobre el arroyo Saldán o a pie por una pasarela de la calle 16.

La cancha se muda

Al contar nuevamente con un espacio para que Güemes y sus chicos jueguen al fútbol, los vecinos del barrio no tardaron en ponerse en marcha para trabajar, y así levantaron rápidamente una nueva cancha de fútbol. Allí se llevaron a cabo, durante décadas, diferentes campeonatos en los cuales los jóvenes entrenados por Güemes obtuvieron diferentes trofeos y medallas.
El cariño y el compromiso por este espacio fue tan grande que, en un principio, los propios vecinos del sector se encargaron del mantenimiento del lugar. Pasado un tiempo, la primera camada de jóvenes que se reunían a jugar fueron quienes se hicieron cargo del mantenimiento y cuidado con medidas reglamentarias. Después de cada creciente, eran esos mismos jóvenes los primeros en aparecer en la cancha con todos los materiales necesarios para volver a dejarla en condiciones. Fue tal el reconocimiento que tenía este espacio en la zona, que al comienzo de la era tecnológica uno de los pocos puntos geográficos del sector en Google Maps era “Las Canchitas de Güemes”.

Primer intento de Iniciativa Popular

Fragmento de nota del Concejo Deliberante de Mendiolaza al Intendente Cruzado

Buscan recuperar su canchita en Mendiolaza

El 12 de agosto de 1998, vecinos y allegados de Mendiolaza presentaron una solicitud que contaba con 140 firmas, cantidad que para esa época eran demasiadas, ante la Municipalidad para que se trate por Iniciativa Popular un proyecto de ordenanza que declarase de interés público-municipal la  “Canchita de Güemes”.

El 2 de septiembre del mismo año, el Concejo respondió que habían elevado ante el Departamento Ejecutivo Municipal una solicitud para que estableciese los límites entre la canchita y la propiedad agropecuaria El Terrón.
El 13 de enero de 1999, se volvió a presentar una nota al Concejo pidiendo el resultado del tratamiento de la Ordenanza o estado de la misma.. Dicha nota también fue enviada al Intendente Oscar Cruzado, pidiendo su apoyo personal, y también como funcionario, para que este pudiera contemplar la posibilidad de arbitrar los medios para que el Concejo Deliberante responda el resultado del tratamiento de dicha Ordenanza.

Sin embargo, la Iniciativa nunca obtuvo respuesta y fracasó, quedando en duda los límites de la Propiedad Agropecuaria El Terrón y la cancha de fútbol.

Morir de aislamiento

Buscan recuperar su canchita en Mendiolaza

Lamentablemente, años después, quienes desarrollaron el barrio privado “El Terrón” ocuparon gran parte de la cancha instalando un cerco perimetral que redujo notablemente su espacio.

Aquello tuvo un impacto significativo, no sólo por el poco espacio que dejó para jugar al fútbol, sino porque restringió particularmente el acceso vehicular al predio. Sumado a ello, la devastadora inundación del 15 de febrero de 2015 provocó un daño inmenso en este predio y destruyó la pasarela de la calle 16, para entonces la única forma de acceso.

Así las cosas, la única manera que quedó para acceder al predio fue atravesar el arroyo Saldan a pie. Esto tendría una particular incidencia en la vida de Roberto Güemes, hijo de Güemes. Roberto se hizo cargo de las canchas luego de que su padre falleciera en el año 2000. Desde entonces, intentó continuar el legado de su padre a pesar de los obstáculos e inconvenientes ya mencionados.

Paradójicamente, el día 24 de agosto del 2020 “el Berto” -como le decían sus amigos-, fue a jugar con su hijo a lo que queda de las canchas, y sufrió una descompensación en el lugar. Al no haber acceso vehicular al predio, Berto no pudo ser asistido por una ambulancia y falleció en la cancha que tanto amaron su padre y él.

Buscan recuperar su canchita en Mendiolaza – Un amor y pasión que se hereda

Como manda la tradicional familiar, la hermana de Berto, Elida Marcela Güemes, junto a su esposo Esteban Barrios y a los hijos de Berto siguen intentando mantener a flote esta cancha, pero se les hace cada vez más difícil sin la ayuda municipal.

Por eso decidieron presentar un proyecto a la convocatoria para el Presupuesto Participativo 2023. El objetivo es recuperar el espacio que ocupó El Terrón, habilitar accesos vehiculares al predio, ampliar las dimensiones de la cancha y utilizar la zona de asadores. Pretenden así brindar un espacio seguro, funcional y atractivo para la práctica de fútbol y disfrute de la comunidad. Aseguran que la rehabilitación de este espacio verde no sólo mejorará el bienestar de la comunidad sino que también enriquecerá la estética y el valor ambiental de la zona.

La propuesta obtuvo el tercer puesto entre los más votados, por lo que les corresponde los $3.000.000 asignados en el Presupuesto a cada proyecto.

Aunque el monto ha quedado desactualizado, los vecinos confían en que podrán concretarlo, y que ese será el mejor homenaje que pueda hacerse a Don Güemes y a Berto.

 

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