Al mal tiempo buena cara
Cosecha de agua en Mendiolaza
La recolección de agua de lluvia es obligatoria en Mendiolaza para las nuevas construcciones desde 2012. Los vecinos que la implementan aseguran que la experiencia es excelente. Sin embargo, no sólo se incumple la ordenanza, sino que muchos desconocen la técnica
En teoría y en la práctica
Cosecha de agua en Mendiolaza
Gustavo es vecino de B° El Talar desde hace 20 años. Desde entonces, varios meses al mes, abastece su casa sólo con agua de lluvia.
“Nosotros juntamos el agua de los casi 200 mts que tiene el techo con un sistema muy simple, unas canaletas por el costado con unos caños que van a una cisterna. Tenemos dos cisternas, una de 12.000 lts y otra de 7.000. Generalmente en diciembre cerramos la llave de paso del agua que llega desde la calle, hasta marzo o abril, cuando empiezan a aflojar las lluvias. Usamos esa agua para regar, mantenemos la pileta, regamos la huerta, incluso la usamos para consumo y nunca hemos tenido ningún problema”.
La práctica de Gustavo, es lo que teóricamente deberían hacer todos los vecinos que hayan construido después de 2012. La ordenanza N°586 dispone que “En todos los proyectos de edificaciones nuevas es obligatoria la recolección de las aguas pluviales caída en los techos planos o inclinados, mediante canaletas y caños transportadores, depositándola en tanques o cisternas con una capacidad mínima de 3000 lts”
Técnica milenaria
La cosecha de agua existe desde hace miles de años y se aplica en diferentes partes del mundo a través de una gran variedad de técnicas y prácticas. Países como Perú lo tienen incluso incorporado en su legislación, y México tiene un gran plexo de programas estatales para la realización de esta técnica de una manera más extendida.
“Es más amplio de lo que parece. Va desde un ámbito totalmente urbano, hasta uno rural y de monte o bosque, de lo micro a lo macro, desde un pequeño techo en medio de la ciudad hasta montañas en la cordillera” destaca el bioarquitecto Rodrigo Carranza.
A nivel doméstico, la modalidad más conocida y difundida de captación y aprovechamiento de agua de lluvia, es la que consiste en captar el agua de los techos de viviendas y establecer un sistema de filtrado para su posterior almacenamiento.
Un método a medida
Cosecha de agua en Mendiolaza
Se puede aprovechar toda el agua que escurra de techos y otras superficies impermeables de la propiedad. El uso al que se destinará la cosecha de agua es determinante para definir el método de cosecha que se elija.
Así, se puede llevar a cabo mediante un sistema más sofisticado o uno más sencillo.
En cuanto a los costos, puede hacerse de manera autogestiva con un mínimo asesoramiento, incluso mediante tutoriales que existen de páginas que promueven esta técnica. Pero un sistema más complejo requiere de asesoramiento técnico y personal especializado.
Así mismo, se debe tener en cuenta el techo que tengan en la casa, si ya hay canaletas o caños que conducen el agua. Respecto al almacenamiento, la capacidad que se requiera determinará si es necesario construir cisternas o si puede solucionarse con tanques o tachos nuevos o usados. Dependiendo del destino, si es para riego o uso personal, pueden necesitarse filtros, bombas, o válvulas.
En todos los casos, el agua recolectada se conduce a través de canaletas, o tuberías, a tanques o recipientes debidamente cerrados para evitar el ingreso de basura, o incluso insectos indeseables en épocas estivales como el dengue, zika, y demás.
Metro y litros
Cosecha de agua en Mendiolaza
Para este sistema es importante conocer la cantidad de agua de lluvia para la época y en qué momento se dan esas precipitaciones. En Córdoba a lo largo de un año en 1m² se puede llegar a juntar 1.000 lts de agua “para hacerse una idea: con una lluvia de 10mm (que es bastante modesta) en un techo de 100m2 se pueden juntar 1.000lts” señala Carranza.
Esto va necesariamente ligado a las estadísticas de consumo. De acuerdo a Aguas Cordobesas el consumo promedio en la provincia es de 350 litros per cápita, cuando lo necesario para la vida, sería un consumo promedio de 100 litros diarios per cápita. Ante esa desproporción, independientemente de lo que se pueda recolectar por este sistema, el consumo responsable, y uso racional siguen siendo la clave para afrontar el déficit de un recurso cuyo suministro se vuelve cada día más crítico. “se debería hacer énfasis en un consumo racional del agua antes de pensar en traer agua del Paraná, con el inmenso gasto en esa obra monumental y todo el gasto en energía para bombear agua a 450 mts de altura” el bioarquitecto
Un pequeño aporte
Cosecha de agua en Mendiolaza
Rodrigo Carranza remarca que “el buen manejo del suelo es la base para que la tierra absorba el agua de lluvia como una esponja y lo vaya largando lentamente durante el año, para que haya agua en los ríos en los meses que no llueve. Por eso nuestros diques son las partes altas de las cuencas, cómo la Pampa de Achala. En lo que nosotros podemos intervenir es juntando el agua de nuestros techos, patios y jardines con distintas técnicas.”
A nivel micro, se propone realizar este sistema de captación de agua en las viviendas, para lograr mayor independencia de la red pública, y un uso más racional de este bien. Ante la crisis hídrica recurrente, es importante para todos buscar alternativas de aprovechamiento, conservación y protección del agua para hacer frente a estos problemas de escasez, y la cosecha de agua se erige como una alternativa al alcance de todos.
Cosecha de agua en Mendiolaza