La experiencia de dos vecinas en los juicios por la memoria
En el marco de las conmemoraciones por el 24 de marzo, dos vecinas de Mendiolaza evocan su participación en los juicios por lesa humanidad. Mabel Martínez fue testigo en el proceso que, en La Rioja, culminó con la condena del gendarme Eduardo Abelardo Britos por el homicidio, entre otros, de Wenceslao Pedernera. Carolina Vaca Narvaja formó parte de la comisión que acompaño el juicio, en Córdoba, en el que se condenó a Jorge Rafael Videla y Luciano Benjamín Menéndez por el asesinato de su padre, Miguel Hugo Vaca Narvaja.
A 48 años del golpe cívico militar, los actos en Mendiolaza serán el viernes, en la Plaza de la Memoria y el sábado en las plazas de B° Mendiolaza Centro y B° Valle del Sol.
Mabel Martínez
La causa «Britos» investigó la participación de Eduardo Abelardo Britos, en el homicidio de Wenceslao Pedernera, el secuestro y los tormentos a Juan Carlos Paschetta y Graciela María Bosfelli y los secuestros y tormentos a otras 42 víctimas. El único imputado en la causa fue condenado a prisión perpetua. El juicio estuvo a cargo del Tribunal Oral Federal de La Rioja. Comenzó el 28 de abril de 2023 y terminó el 11 de diciembre del mismo año.
Su experiencia
Wenceslao Pedernera, era un campesino, militante, católico, que trabajaba en Chilecito, y por esa zona de La Rioja. Britos, había estado en su momento a cargo del Instituto de Rehabilitación Social en La Rioja, que funcionó como centro clandestino de detección en los años de la dictadura. Hubo muchos presos políticos que testificaron que era terrible la tortura, el tormento que sufrieron cuando esta persona estuvo a cargo. O sea que eran varias causas dentro del mismo juicio, pero yo fui como testigo de Wenceslao Pedernera. Yo a Wenceslao no lo conocí, yo en ese momento tenía 11 años, pero después, conocimos a su familia porque se hizo bastante cercana su esposa con mi mamá y con mi papá. Mis padres siempre fueron católicos y muy activos dentro de la Iglesia, y cuando llega la Angelelli, el obispo, en el año 68 a La Rioja, ellos siguieron trabajando muy cercano con la Pastoral Social de Angelelli. Después, toda la gente que trabajaba dentro de la Pastoral fue perseguida y cuando comienza la dictadura fue terrible la persecución de todos los que trabajaban en la Iglesia. Cuando asesinan a los curas de Chamical (N del R: los sacerdotes Carlos de Dios Murias y Gabriel Longueville y el laico Wenceslao Pedernera) había varios sacerdotes de Chilecito que dormían en mi casa como un modo de protegerse. La casa parroquial se estaba construyendo junto con el templo y era fácil entrar. Por eso me citó la querella, para dar testimonio de la persecución que sufrían todos los allegados a la Pastoral Social de Angelelli
Después yo y mi familia nos hicimos muy cercanos con la hija de Wenceslao y con su esposa. Fuimos conociendo su historia, del trabajo que hacía, que estaba creando una cooperativa junto con unos curas franceses, haciendo un trabajo muy importante con la gente más humilde. Habían conseguido comprar unos terrenos y ahí se estaba armando una cooperativa de trabajo donde estaba Wenceslao. Y bueno, una noche, el 25 de julio a la madrugada, van a buscarlo a su casa, él sale conmocionado y en la oscuridad, sin poder ver mucho. Entonces, le disparan unos tiros y después fallece el otro día en el hospital de Chilecito.
Yo creo que lo más importante de este juicio fue poder clarificar la persecución, la cárcel, las torturas y la muerte que sufrieron muchas personas que comulgaban con las ideas de Angelelli, o sea con las ideas católicas. Siempre se lo quiso vestir de zurdo, de obispo rojo,, pero él nunca se salió de su línea trazada del Evangelio y realmente lo llevó adelante hasta la muerte.
Al principio yo veía como natural lo que habíamos vivido. Pero cuando me preguntaron si quería ser testigo en el juicio, me di cuenta de que yo era la única de mi familia que podía dar cuenta un poco más con detalles de lo que habíamos vivido en ese momento, porque mis hermanos más chicos eran muy chicos, tenían 5 o 2 años y mi hermano mayor, mi papá y mi mamá habían fallecido. Y cuando me senté en el estrado, cuando me senté ahí a dar el testimonio, dije qué suerte que había tomado esta decisión, porque era contar parte de la historia de mi familia, de lo que habíamos vivido. Yo creo que mis padres, en su generosidad y en su solidaridad hacia los demás, no midieron el riesgo de lo que estábamos corriendo todos. Porque mi casa en ese tiempo tampoco era segura y podían haber ingresado por cualquier lado y podrían haber matado a todos si querían. La verdad que fue importante para mí dar ese testimonio»
El sentido de la conmemoración
Yo creo que lo más importante es que las nuevas generaciones tengan conciencia, sepan de todo lo que sucedió en nuestro país, que es la historia reciente. Hay mucha juventud que no la sabe, porque después de más de 40 años, todavía se sigue escondiendo la verdad, se sigue escondiendo lo que realmente sucedió en nuestro país, se lo minimiza. Que si son o no son 30 mil, no importa, así fuera un sólo desaparecido, no debería haber sucedido nunca en nuestro país, semejante aberración. Una cosa tan espantosa, nunca tendría que haber sucedido. Y yo creo que nosotros tenemos que seguir sosteniendo la memoria activa, seguir contando todo esto para que las nuevas generaciones sigan levantando las banderas de la justicia, de la igualdad, de la equidad, porque no se puede seguir construyendo un país si no es con esas banderas. Por eso me parece muy importante que esto se siga celebrando, se siga recordando, se siga teniendo memoria.
Carolina Vaca Narvaja
La causa “UP1 o Alsina” investigó los asesinatos de 31 militantes políticos detenidos en la Unidad Penitenciaria Número 1 (UP1) del barrio San Martín, en Córdoba, entre abril y octubre de 1976, quienes fueron trasladados al Departamento de Informaciones de la Policía de Córdoba (D2), donde fueron torturados y luego fusilados simulando un intento de fuga. Todas estas personas habían sido encarceladas antes del golpe de Estado y detenidas “legalmente” a disposición del Poder Ejecutivo Nacional. De los 30 imputados, 16 fueron condenados a prisión perpetua, 8 recibieron condenas entre 7 y 14 años y 6 fueron absueltos. El juicio estuvo a cargo del Tribunal Oral Federal Nº 1 de Córdoba. Comenzó el 2 de julio de 2010 y terminó el 22 de diciembre de ese año
Su experiencia
«Mi papá era preso político y fue asesinado ahí junto con 31 presos políticos de la penitenciaria que fueron sacados en grupos. En el 2016 hicimos un primer homenaje cuando se cumplieron los 30 años y ahí nos conocimos con los expresos políticos que habían estado con nuestros padres y conocimos a los hijos, y nos empezamos a encontrar y a trabajar para el juicio que se venía. En ese momento, quien comienza a armar los juicios fue María Elba Martínez y en ese juicio mi hermano, Hugo, estuvo también con ellas, representando varias de las causas. En la comisión, que estaba conformada por hijos, hijas, familiares, amigos, amigas de los presos, hicimos una serie de homenajes, de ferias, trabajamos para que preservaran además el edificio, sobre todo los dos pabellones donde estuvieron los presos y las presas políticos en la UP1. Llegamos al juicio, que iban cambiando la fecha de inicio, con algunas intervenciones artísticas. Ahí entró a jugar mucho el arte, el teatro, el cine, la literatura, las artes visuales, hicimos la silueta de los 31 que estuvieron presentes en el juicio. A partir de intervenciones, primero ahí en frente a tribunales, cuando cambiaban la fecha, y después hicimos otra intervención con la comisión en la plaza San Martín, donde se intervinieron esas siluetas de acuerdo a las características y personalidades de cada uno de los 31 que fusilaron».
El sentido de la conmemoración
Marzo, desde que tengo memoria, es un mes justamente de memoria. Desde que tengo memoria, de memoria. Donde insistimos en recordar lo que nos pasó, para que esto no se vuelva a repetir. Y parece una frase vacía, pero en realidad es una frase que está llena de contenido. Desde las distintas expresiones, en mi caso desde el arte, desde el teatro, desde la música. Hemos insistido desde hace más de 40 años, en temáticas como la identidad, como la memoria, porque creemos que es muy necesario no olvidar, porque el olvido mata. Y justamente para mantener viva a los 30.000, es necesario recordar. Así que realmente es muy importante, y gracias a esas memorias, gracias a ese recuerdo, gracias a esa insistencia que tuvieron los organismos, que tuvimos, porque en su momento yo también estuve trabajando para el juicio en donde se lo condenó a Videla, insistir para que realmente esto no vuelva a pasar nunca más. Y hoy más que nunca, cuando el negacionismo está ganando espacio, cuando quieren volver a traer el discurso de que esto fue una guerra, entonces es fundamental seguir insistiendo en todas sus aristas».
Actividades, el viernes en Mendiolaza
Las actividades conmemorativas por el 24 de marzo, organizadas por la Comisión de la Memoria Mendiolaza con la adhesión de las comisiones vecinales y de La Colombina Escuela de Teatro, iniciaron el viernes pasado con la presentación de Memorias del Altillo, protagonizada por Cecilia Vaca Narvaja y continuarán durante el próximo fin de semana.
El viernes 22, desde las 20:00 la cita será en la Plaza de la Memoria de B° El Talar. El encuentro en la plaza, iniciará con la puesta de la obra de teatro Mi Historia, ganadora de la convocatoria Escena y Memoria del Archivo Provincial de la Memoria. Además, habrá una muestra sobre los centros de detención clandestina de Campo de la Ribera y D2, música en vivo, intervenciones realizadas por jóvenes y la lectura del documento.
El sábado 23 la actividad se traslada a otros barrios. A las 10:00 en Plaza del Algarrobo de B° Mendiolaza Centro, y a las 11.30 en la Plaza de los Pájaros de B° Valle del Sol, habrá reforestación autóctona y pintada de pañuelos. Se invita a llevar flores rojas, pañuelos blancos y mate.
El domingo 24 a las 17:00 las organizaciones de Mendiolaza participarán en la marcha por la memoria, la verdad y la justicia, que partirá desde Av. Colón y Cañada, en Córdoba.