Tomás Grunhaut es el responsable del control de los operativos terrestres.
El ex concejal de Mendiolaza, y ahora Delegado de la Comisión Nacional de Transporte en Córdoba, estrenó su cargo en un momento particularmente crítico. De esa repartición depende el control de los colectivos que traen a Córdoba los repatriados.
Varios miles de cordobeses estaban fuera del país cuando se cerraron las fronteras para evitar la extensión de la pandemia de coronavirus. La repatriación se va produciendo a cuenta gotas pero, según cuenta Grunhaut, todos los días llegan nuevos contingentes a la terminal de Córdoba.
El funcionario destaca la gran labor que se realiza entre las 24 jurisdicciones del país para repartir, vía terrestre, a sus provincias de origen a todos los argentinos que llegan a Ezeiza o a Retiro.
«Trabajamos con todos los protocolos adecuados para el caso – explica Grunhaut – Es obligatorio que cada pasajero que esté en un coche vaya con barbijo y cuando llegan a destino trabajamos en conjunto con el Ministerio de Salud de la Provincia y la Policía. Se les hace un diagnóstico previo y, obviamente, van a cuarentena obligatoria. Los llevan desde la Provincia, se aseguran de que vayan a domicilio a sus domicilios».
También se controlan las medidas de prevención de los choferes: además del uso de barijo y guantes, se debe sellar la cabina de los conductores para que los pasajeros no puedan ingresar.
Los colectivos, que generalmente viajan completos parten desde Ezeiza con los pasajeros que hayan llegado del extranjero en avión, y pasa por Retiro donde recoge, no sólo a repatriados sino también a quienes hayan sido autorizados para viajar.
«Nuestro principal trabajo es repatriados – detalla el Delegado de la CNT. – Pero también hay servicios que el Ministerio ha autorizado para gente que puede estar desde hace tiempo en un lugar, en una provincia, que no es donde vive. El Ministerio de Transporte va autorizando algunos servicios para que esa gente puede ir volviendo sus hogares.
«Puede haber gente que venga con alguna demora, o que los viajes sean un poco más largos de lo habitual. Eso se debe a los problemas que estamos teniendo en la ruta en los controles, no solamente de Gendarmería, si no también de las policías provinciales, que por ahí hacen un poco tedioso el andar de los coches. Pero estamos haciendo un gran trabajo para que todos los argentinos están en el exterior pueden regresar a sus hogares», culmina Grunhaut.
La entrevista completa puede escucharse en el siguiente audio
Foto: colage de archivo