Pigrit: un proyecto de remeras diseñadas por un adolescente
Un joven artista en Mendiolaza. Foto: Santiago Ferreyra junto a Mylo, la nueva cara de su proyecto.
Con tan solo 14 años, a punto de cumplir 15, Santiago “Pigrit” Ferreyra empezó hace unos años a vender remeras con diseños propios. Todo comenzó cuando mandó un dibujo a un grupo de amigos y uno de ellos sugirió que haga sus diseños en remeras. “Lo pensé, me lo plantee y llegue a la conclusión que llevar mi arte a las remeras iba a ser un experimento interesante”, expresó Pigrit.
Así arrancó su emprendimiento que lleva su nombre artístico, Pigrit, que viene del latin pigritia que significa pereza; un concepto alejado de la personalidad inquieta de Santiago pero que quedó como una ironía. «Yo no puedo quedarme quieto, siempre estoy haciendo muchas cosas, proyectos artísticos paralelos que pueden llevar la música, la escritura, el diseño», explicó.
Hoy con 17 años no solo se plantea nuevos diseños para cada temporada; sino que además piensa en que su proyecto sea cada vez más sostenible para el medio ambiente. Vecino de Barrio Residencial Centro hace 14 años, Ferreyra vende sus remeras a conocidos, vecinos, amigos y familiares. “Hasta ahora no se ha expandido a un nivel muy grande pero mi público me apoya, difunde lo que hago”, expresó.
Como funciona Pigrit
Todo diseño de Pigrit comienza con la tinta y el papel. Luego el diseño se escanea para ser vectorizado, es decir se pasa el dibujo de pixeles a vectores para que así tenga calidad y se pueda trabajar en cualquier tamaño.
Cuando el diseño esta finalmente vectorizado, se manda a Pasto Taller, un emprendimiento de serigrafía; y se imprimen los diseños en las remeras que son de algodón puro. Respecto a este proceso Pigrit explicó: “Es un medio distinto al que normalmente trabajo, requiere otro proceso creativo que es menos individual. Yo puedo hacer el dibujo pero luego requiero coordinar con otras personas para poder plasmar y terminar lo que imagine”.
En lo que refiere a la inspiración Pigrit destaca 2 puntos importantes: un diseño que se vea interesante y que pueda transmitir un mensaje sin palabras. Respecto al primero, Pigrit explicó que le gusta aprovechar la serigrafía. “La particularidad de la serigrafía es que uno puede jugar con esos elementos, con hacer capas de colores, o si quiere que vaya un solo color y así generar distintas texturas con un método que no es muy sofisticado”, expresó.
Un proyecto orientado a ser sostenible
Aunque por cada temporada hay distintos diseños, Pigrit explicó que la particularidad de la última es la introducción de un nuevo personaje, Mylo, a esta marca. “Este personaje que ahora es parte del emprendimiento y que de cierta forma quiero que sea la cara del emprendimiento”, relató.
Pigrit explicó que Mylo es un personaje que nace a partir de los deshechos textiles y que decide buscar su identidad: “Si seguir los pasos de las grandes fábricas que lo dieron a luz accidentalmente o si quiere seguir un camino que vaya por el slow fashion*, un consumo más consiente, menos masivo pero de calidad”, explicó Pigrit.
Pigrit destacó que en su emprendimiento aunque el método de impresión sea a base de plástico tradicional; el hecho de no ser masivo es lo que ayuda a un consumo más pequeño y que no afecta tanto al medio ambiente, explicó.
Aun así él expresó: “En un futuro me gustaría utilizar tintas naturales, me gustaría descubrir junto a Flor (de Pasto Taller) un método en el que haya otro tipo de impresión; pero mientras tanto me enfoco en la no masividad, que no sean tantas prendas pero que las prendas que salgan sean de calidad y duren”.
Si queres encargar una remera de Pigrit, podes hacerlo a través de su pagina de instagram @pigrit_.
*Slow Fashion significa moda lenta y es un concepto que se contrapone a todo lo que implica el Fast Fashion (moda rapida) buscando generar conciencia en los procesos y recursos necesarios para fabricar la ropa; ademas de que busca el respeto hacia las personas involucradas y hacia el medio ambiente.